La agrupación folclórica "Los Manantiales” es un conjunto tradicionalista de nuestra ciudad que cumple sus 28 años de trayectoria habiendo ganado, en toda su historia, un total de 63 premios y han pasado alrededor de 2000 alumnos.
El grupo de baile fue creado por Daniel Oscar Vallejo que, si bien es yesero de profesión, es un apasionado del baile folclórico y ha estudiado para poder ejercer como profesor tanto con sus alumnos de Los Manantiales como así también en la Escuela Provincial de Arte Nº 500.
Los inicios
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En mayo de 1988 fue el inicio de la agrupación porque fue cuando Oscar Vallejo, que hoy tiene 53 años, comenzó a dar sus clases.
Sin embargo, ya a los 10 años Vallejo empezó a asistir a clases de folclore con Miriam Dominici y terminó sus estudios de baile a los 22 años.
Luego de eso, con ayuda económica de sus padres, empezó a viajar todos los fines de semana, por dos años y medio, a Belgrano (Buenos Aires), en el Instituto Folclórico Pedro Berruti, para continuar perfeccionándose. "Tengo mil anécdotas de los viajes. Hoy por hoy lo digo: yo no sé si quería ser profesor o qué, pero mis padres me mandaron de chiquito y tenía condiciones. Yo soy roquero al cien por cien, y durante la semana no escucho folclore pero son muchos años y me encante bailar”, indicó Vallejo.
Cuando terminó de estudiar con su profesora necochense, ella ya no quería continuar enseñando y le propuso a Vallejo que empiece a enseñar por su cuenta y que continúe enseñándole a los chicos que le quedaban a ella. "Tenía 22 años, no sabía qué quería hacer pero a la semana empecé con cuatro alumnos y a las dos semanas ya tenía seis varones y cinco mujeres. Así empecé a trabajar en mayo del ‘88”
El 19 de noviembre de 1988, el grupo hizo su primera presentación bajo el nombre de Agrupación Folclórica Los Manantiales en el Club Danés. "Ese día se nos llenó todo porque somos de una familia grande”, contó Oscar Vallejo.
Viajes y competencias
Después de festejar su tercer aniversario el grupo empezó a incursionar en competencias dentro de las distintas categorías que ofrece la danza y fue en Mar del Plata donde tuvieron la primera oportunidad de pasar a una final. "Fue un cuarteto de malambo norteño y fue el primer viaje”, recordó el profesor.
Con la danza y el malambo, Vallejo y su grupo continuaron por los siguientes diez años cosechando los frutos de sus horas de ensayo y de la pasión que le ponían todos los alumnos. "Fueron tiempos muy lindos pero no vivo de fotos amarillas y siempre trato de ver lo que viene y siempre con la esencia que uno tiene”.
En cuanto a estas competencias, y haciendo una comparación con una presentación común en algún club o teatro, señaló que "es un cambio muy grande porque hay un jurado que son profesores o personas que viven de la danza y saben mucho”.
Luego de recorrer varios lugares del país como Mar del Plata, Tandil, La Plata, Santa Fe, Neuquén y La Rioja y han conseguido hasta la fecha un total de 63 premios entre los que hay 21 primeros puestos de malambo. "Nunca tuve la ambición de llegar a algo, siempre se fue dando, fuimos de un torneo a otro y conseguimos lo que conseguimos”.
Respecto a los costos de los viajes para ir a cada lugar, tenían que organizarse para realizar almuerzos, rifas y para que cada familia aporte su granito de arena. "El viaje más grande que hicimos fue a Chivilcoy que fuimos 80 en dos micros, fue una movida grande. Fue en 1993, un gran año para la agrupación donde estuvimos en cinco torneos y en diciembre hicimos nuestro primer viaje fuera de la provincia”, contó el profesor.
Un cambio
Al fallecer su padre en 2002, Vallejo tuvo que hacerse cargo completamente del oficio de yesero y eso fue un cambio muy grande en su vida artística porque ya no dispuso de tantos tiempos como antes. Por este motivo, dado que no vive de la danza, dedicó horas de los fines de semana a los ensayos y ya no participan en competencias tanto como antes.
Sin embargo, el último evento del que participaron fue en 2015 en General Madariaga (donde sacaron un segundo premio), y tienen pensado continuar participando solo que actualmente, al haber nuevos integrantes, deben ensayar más para poder estar a la altura de los competidores de cualquier parte del país. "Hay una competencia muy alta hoy en día. Han cambiado las modas y la forma pero, si bien no soy un fanático que está en todas las peñas que se hacen, en las clases se mantiene la adrenalina porque cuando me pongo a trabajar pongo todo en las clases”.
Por otra parte, la agrupación tiene vestimentas nuevas que cada uno se ha encargado de ir adquiriendo ya que los valores son bastante elevados.
Ensayos y festejo
El cuerpo de baile que actualmente cuenta con 28 bailarines y, si bien por nueve años ensayaron en el Club Huracán, hoy realiza sus ensayos en la Escuela Nº 12, los días miércoles y sábados.
Además, cabe destacar que hoy Vallejo es profesor en la Escuela Provincial de Arte Nº 500 desde hace cinco años en donde enseña en el profesorado de danza folclórica y en los talleres de malambo.
También es profesor de la agrupación "El Caudillo” que se empezó a formar en un centro de jubilados y que el año pasado llegó a tener sesenta alumnos. Además, esta segunda agrupación de baile a cargo de Vallejo ya cumplió sus seis años de trayectoria en el pasado mes de marzo.
Finalmente, es importante mencionar que, si bien el aniversario de "Los Manantiales” fue el 6 de mayo, el festejo se realizará el 11 de junio en el salón de fiestas del Centro Vasco, a las 21.30, para festejar los 28 años donde estará presente también el grupo musical necochense, ‘Sushay’, y también ‘La Eulogia Folk’, traídos desde Ezeiza.