Luego del escándalo que se generó por las fotos al natural que le tomaron mientras veraneaba con Mauro Icardi, Wanda Nara rompió el silencio.
“Estoy acostumbrada a que deformen mi vida al antojo y conveniencia de cada revista, programa o situación. Por eso acepté hacer estas fotos sin retoques porque no los necesito. Todos hablaron de mi celulitis, pero nadie reparó en la cara de felicidad de Mauro. Las redes sociales me dan la posibilidad de tener acceso directo a la gente, y que ellos vean por cámara cómo soy”, expresó Wanda en una entrevista con la revista Gente.
Por otro lado, la modelo aseguró: "Es lógico que después de varios partos una mujer tenga celulitis. Pero esas fotos las retocaron para perjudicarme: yo sé dónde tengo y dónde no. Además, me causó risa la panza que me hicieron: ni en mis embarazos estuve así. Con mis posibilidades económicas nunca llegaría a estar tan mal como me mostraron en esas fotos: existen un millón de tratamientos para solucionarlo”.
“No soy obsesiva con mi cuerpo, porque no tengo ningún complejo. A mis hijas les voy a enseñar que la belleza va por otro lado, porque el hombre no mira la celulitis; el hombre quiere a su lado a una mujer real, íntegra. La perfección no existe. Para todo lo demás hay mil truquitos y cremas, pero el interior es difícil de cambiar... además, todas mis fotos en las playas son sacadas por el potro de mi marido. Si tuviera algún complejo, al último que le daría una cámara es a él. Mauro me hace los videos y las fotos con su teléfono y su dron", sentenció.